Tras uno de los meses de mayo más tormentosos de lo que va de siglo XXI en nuestro país, hemos comenzado junio con un tiempo igualmente marcado por la inestabilidad y con temperaturas no demasiado calurosas para estas alturas del año.
Y es que se mantiene la llegada intermitente de pequeñas borrascas a la península desde latitudes superiores, que arrastran aire más fresco y favorecen la aparición de chubascos localmente tormentosos sobre la península en determinadas jornadas, ayudado por la -cada vez más fuerte- insolación de esta época pre-veraniega.
Si echamos un vistazo a las previsiones estacionales para este mes de junio, observamos una clara continuidad de este tiempo inestable y fresco para la mayor parte de la península Ibérica de cara a las próximas semanas.
Se prevé una marcada anomalía negativa en las temperaturas para este junio hacia el suroeste de Europa (menos calor de lo normal), lo que incluye directamente a la península Ibérica bajo una situación de temperaturas demasiado frescas respecto a la media:
Por contra, parece que predominará una extensa y destacable anomalía positiva de temperaturas (más calor de lo normal) hacia los países del interior-norte y este de Europa.
Recordemos que en semanas anteriores hemos visto cómo algunos países nórdicos alcanzaban temperaturas 25 y ¡30ºC! junto a la superación de varios récords, mientras que en la península apenas alcanzábamos los 18 a 24ºC en líneas generales.
Estas previsiones para el presente mes nos llevan a pensar en un patrón muy parecido al que hemos tenido durante mayo, es decir: bajas presiones en el Atlántico afectando a la península Ibérica con tiempo revuelto y temperaturas por debajo de lo normal, mientras que el calor deriva hacia el Mediterráneo y el resto del continente europeo.
Previsiones que, además, son claramente apoyadas por los grandes modelos estacionales disponibles hoy en día; el CFS de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y el modelo del Centro Europeo (ECMWF).
El calor ganará terreno en la segunda quincena de junio
Aunque la tendencia general para todo junio viene marcada aparentemente por este patrón de inestabilidad y temperaturas frescas, lo cierto es que lo que los modelos estacionales probablemente están reflejando ‘sólo’ la gran anomalía negativa de temperaturas que nos afecta en esta primera quincena del mes.
Y es que comienza a verse ya una tendencia cada vez más cálida a medio-largo plazo para la península, que empezaría a ser evidente a partir del 15 de junio con la re-estructuración y acercamiento del anticiclón de las Azores hacia la península, y los primeros 35ºC de la temporada en regiones del interior-sur peninsular.
Sin embargo, de momento la segunda quincena del mes nos queda aún demasiado lejos como para poder concretar más, pero parece claro que para mediados de mes se cortaría esta llegada de masas de aire fresco y precipitaciones, para dar paso a un tiempo más propio del mes de junio. Veremos cómo avanza el mes.
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